martes, 11 de junio de 2013

Las vanguardias del siglo XX: Simbolismo y Fauvismo

Simbolismo:

El simbolismo fue uno de los movimientos artísticos más importantes de finales del siglo XIX, originado en Francia y en Bélgica.

Las características más importantes del simbolismo son:

·         El color: a veces se utilizaban colores fuertes para resaltar el sentido onírico de lo sobrenatural. Del mismo modo, el uso de colores pasteles juntos con la difuminación del color perseguía el mismo objetivo.
·         La temática: pervive un interés por lo subjetivo, lo irracional, al igual que en el romanticismo. No se quedan en la mera apariencia física del objeto sino que a través de él se llega a lo sobrenatural. Ya no pretenden plasmar el mundo exterior sino el de sus sueños y fantasías por medio de la alusión del símbolo. La pintura se propone como medio de expresión del estado de ánimo, de las emociones y de las ideas del individuo, a través del símbolo o de la idea.
·         Las técnicas: lo que une a los artistas es el deseo de crear una pintura no supeditada a la realidad y en donde cada símbolo tiene una concreción propia en la aportación subjetiva del espectador y del pintor. No hay una lectura única, sino que cada obra puede remitir cosas distintas a cada individuo. Su originalidad no estriba en la técnica sino en el contenido.
 
Como exponentes del simbolismo destacan autores como Gustave Moreau, Odilon Redon y Pierre Puvis Chavannes, entre otros.
 
G. Moreau, “Europa y el toro” (1869)
 
 
G. Moreau, “Júpiter y Semele” (1894-95)
 
 
O. Redon, “El carro de Apolo” (1909)
 
 
O. Redon, “El sueño” (1904)
 
 
P. P. Chavannes, “El pobre pescador” (1881)
 
 
P. P. Chavannes, “Bosque sagrado” (1884)
 
 
 
Fauvismo:
 
El fauvismo fue un movimiento pictórico francés caracterizado por un empleo provocativo del color. Para los fauvistas el cuadro debía ser expresión, no composición y orden.
 
El precursor de este movimiento fue Henri Matisse y su mayor influencia en la pintura posterior se ha relacionado con la utilización libre del color. En 1904 pintó “Lujo, calma y voluptuosidad”, considerada como la obra síntesis del posimpresionismo que fue fruto de un ejercicio de búsqueda personal y se convirtió en un manifiesto de lo que sería el fauvismo poco después.
 
H. Matisse, “Lujo, calma y voluptuosidad” (1904)
 
 
Tomaron como referente la obra de Gauguin de la que aprendieron la libertad en el uso del color así como la liberación del temperamento y el instinto personal. También admiraban la capacidad de síntesis y el sentido decorativo de su obra.
 
Las características más importantes del fauvismo son:
 
·         La liberación del color respecto al dibujo exaltando los contrastes cromáticos.
·         Pierden importancia aspectos como el modelado, el claroscuro o la perspectiva. La técnica pictórica fovista emplea toques rápidos y vigorosos, trazos toscos y discontinuos: se persigue dar una sensación de espontaneidad.
·         Tiene como intención expresar sentimientos.
·         El dibujo será un aspecto secundario. Se destaca la función decorativa y se emplean las líneas onduladas.
·         Defienden una actitud rebelde, un intento de transgresión de las normas con respecto a la pintura.
·         Con respecto a los temas que pintan existe una gran variedad: algunos pintan el mundo rural y otros el ámbito urbano. Algunos realizan desnudos e interiores mientras que otros prefieren la pintura al aire libre influidos por las costumbres del impresionismo.
 
Bibliografía
 
 

1 comentario: